Os vamos a volver loc@s. Transformamos las pulseras en colgantes como os mostramos aquí, y ahora transformamos un collar en una pulsera. Pensaréis que somos unas caprichosas y que no nos conformamos con nada, pero no es así: somos expertas en dar segundas oportunidades a cosas que están en desuso. Y esto ocurre con este collar, con muchos años a sus espaldas y puesto en muchas ocasiones, ya estaba olvidado en el joyero... Pero como nos resistimos a deshacernos de él, pensamos en convertirlo en algo más ponible...
Básicamente lo que hicimos fue cortar el collar a la altura del broche, trenzar el alambre para que las piedras no se descoloquen, cortar el sobrante de alambre, poner nuevamente el cierre y fijarlo con una gotita de pegamento. En diez minutos hemos transformado nuestro collar, y el resultado es éste:
Básicamente lo que hicimos fue cortar el collar a la altura del broche, trenzar el alambre para que las piedras no se descoloquen, cortar el sobrante de alambre, poner nuevamente el cierre y fijarlo con una gotita de pegamento. En diez minutos hemos transformado nuestro collar, y el resultado es éste:
Visto así parece sencillo, pero hay que verlo para darle ese toque que vosotras le daís. Voy a buscar en mi joyero....a ver que sle.2
ResponderEliminarQue guay quedó! Pero es verdad que parece facil... y luego me pongo a hacerlo y no me sale ni la mitad de bien como os salió a vosotras :)
ResponderEliminarBesitos
os ha quedado genial. Bss chicas.
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