Nos encanta preparar tartas saladas, pero ésta nunca la habíamos hecho. Aprovechando que aún nos quedaban unas morcillas en la nevera, obsequio de la última matanza, y que no nos apetecía cocinar con ellas un potaje, nos hemos atrevido con esta propuesta y el resultado es espectacular.
Primero se desenrolla cuidadosamente la lámina de hojaldre y se forra el molde para horno ayudándonos del papel que trae el hojaldre Se cortan los bordes sobrantes (no los tiréis, los aprovecharemos para hacer alguna cosita) y se pone el papel cubriendo toda la base. Se añade peso en el centro, que será donde después pondremos el relleno. Si no tenéis el utensilio para este fin, os recomiendo que pongáis un buen puñado de garbanzos sobre el papel. Se mete al horno a 225ºC durante 15 minutos aproximadamente. Pasado este tiempo, se retiran el papel y los garbanzos.
Se pican y doran los ajos en una sartén. Se añaden las morcillas una vez retiradas la piel y se saltean. Si son muy fuertes, con una es suficiente. Se añaden los champiñones, se condimenta con pimienta y se rehoga todo.
En un bol, cascamos los huevos y salamos. Añadimos el salteado y trituramos el conjunto con batidora. Rellenamos el hojaldre con la pasta. Se hornea a 180ºC durante 15 minutos. Durante este tiempo iremos comprobando que el relleno va cuajando, y que el hojaldre no se reseca.
Se deja reposar durante 5 minutos y se sirve cortada acompañada de un gajo de manzana.
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| fotos: sisters blog |
Tenia que preparar una receta para compartir con mis compañeras en el trabajo y con esta conseguire el premio a la originalidad, gracias,
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